Juicio por un Óscar que perteneció a la actriz Mary Pickford
-
LOS ÁNGELES (AFP) - El juicio entre la Academia de los Oscares y tres propietarias de un Óscar concedido a la actriz Mary Pickford, estrella del cine mudo, comenzó este miércoles en Los Ángeles, donde las dueñas reclaman su derecho a vender el trofeo contra las advertencias en contrario de la organización que los otorga.
El reglamento de la Academia de las Artes y las Ciencias del Cine, que organiza la ceremonia anual de estos premios desde 1929, estipula que las estatuillas doradas no pueden ser vendidas sin su consentimiento y que tienen el derecho a adquirirlas por sólo 10 dólares si las ponen en el mercado.
"La Academia es muy celosa de su símbolo más célebre", dijo uno de sus abogados, Christopher Tayback, en sus declaraciones preliminares ante un jurado de Los Ángeles.
La prestigiosa institución se encuentra en conflicto con tres herederas de la actriz Mary Pickford. Estas últimas poseen tres estatuillas, dos de ellas concedidas a Pickford y una a su tercer marido, el actor Charles Rogers.
La Academia, que inició la demanda por "ruptura de contrato", asegura que tanto Pickford (1892-1979) como Rogers (1904-1999) habían aceptado por contrato la vigencia del reglamento de la institución, pero sus herederas alegan que la firma de Pickford en el documento es falsa. El comienzo del proceso está previsto para este miércoles y los alegatos de las partes se escucharán a partir del lunes próximo.
Por: Mauricio Matamoros “ Débil cuando está viva, pero fuerte cuando está muerta”. Akihiro Kitajima, Horror Movie Shi Esa cita, queda como anillo al dedo para gran número del cine de espectros japonés; sobre todo, desde el realizado con la aparición de Ringu , en 1997. Y aunque no pude evitar ponerla por su contundencia, he de aceptar que no se aplica del todo a Una llamada perdida ( Chakushin ari , 2003), la película que ha provocado este texto. Con sus cerca de setenta filmes a cuestas, Takashi Miike ha llegado a una excelencia formal pocas veces vista y, por tanto, de forma casi natural, también han comenzado a surgir sus detractores. Con Una llamada perdida esto se hace patente, pues no han sido pocos los que han manifestado su desacuerdo con este primer acercamiento absoluto de Miike al género de horror. Desde luego, lo que ha quedado claro, es que el público ya comienza a quedarse corto para entender a este extraordinario (en el sentido estricto de la palabr...
Por: José Luis Ortega Torres Parida en 1988, justo cuando el cine de encueres picantes y albures prominentes (¿o era al revés?) se encontraba en su máximo apogeo y sintomática saturación, Adolfo Martínez Solares –de la dinastía de mismos apellidos– dirigió lo que hoy se supone es una de las obras cumbres de la sexycomedia ochentera: Tres lancheros muy picudos . Digo se supone porque en realidad, esta película no es más que la repetición ad nauseaum de sobados tópicos ya envejecidos casi al mismo tiempo de su nacimiento pero, para mayor desgracia, utilizados acá sin ningún dejo de ilación; y no es que se pretenda obtener de estas cintas paradigmas de guiones, pero por lo menos sí una lógica medianamente desarrollada dentro de los cánones de este subgénero engañosamente erotómano, como en su momento lo tuvieron El día de los albañiles (1983) y Los verduleros (1985) ambas del propio Adolfo Martínez Solares, con mismas las fórmulas pero mejor atino en su desarrollo. Existen qu...
Por: Alberto Acuña Navarijo loungeymartinis@hotmail.com Creo que la mejor manera para empezar el presente texto, será sentenciarlo del siguiente modo: La Cumbia Asesina (1991) es más naca que ponerle una playera de Snoopy al asiento del coche. No me malinterpreten. Una de las principales virtudes del que es considerado el único videohome “de culto”, es precisamente que exuda vulgaridad de una manera natural, sincera y sí, también muy divertida. No es casualidad entonces, que La Cumbia Asesina , lleve la firma de Christian González. Es curioso. Cada vez que los pelados de Revista Cinefagia , tenemos la oportunidad de hablar de Christian González, nos referimos a él como un autor maldito con comprobadas aptitudes y que anda necio con que el videohome pueda ser tomado en serio como una alternativa para hacer cine de calidad, a bajísimos costos y redituable; pero quien sabe por qué demonios hemos pasado de largo que a través de su inclasificable y abultada filmografía, ya está acostumbr...